Las cuentas de la lechera

Javichu, haz cuentas porque estas que te dejo me cuadran bastante más que las de FP


El 14 de mayo pasado, a la mañana siguiente del triunfo blaugrana en la Copa del Rey, Florentino Pérez prometió tres cosas: fichar a los nuevos galácticos, españolizar el equipo e invertir en un año lo previsto para tres. Ha cumplido sus promesas, pues aquí están ya los NeoGalácticos así como un montón de buenos futbolistas españoles y una inversión que hoy desmenuzaremos. Como objetivo del nuevo proyecto, imitar el triplete logrado por el Barça hace unos meses y que se erige en el nuevo santo grial del madridismo. Como reto, superar el pobre balance del primer mandato galáctico, que se saldó con mucho ruido y artificio pero pocos éxitos tangibles, pues tras seis años de gestión dejó en las vitrinas sólo las mismas ligas que conquistó Ramón Calderón en apenas dos años y la mitad de Champions que logró Lorenzo Sanz, amén de una deuda no muy lejana a la heredada: Florentino entró con 282 millones de deuda y salió con 194, pese al “pelotazo” de la Ciudad Deportiva. Este es el balance real del primer Florentinato, por lo que no sorprende que nadie en Madrid quiera hoy recordarlo.

La Galaxia 2.0 se inaugura con una inversión espectacular en fichajes: Cristiano Ronaldo (94 millones), Kaká (67), Xabi Alonso (35,5), Benzema (35), Albiol (15), Negredo (5,5), Granero (5), Arbeloa (4) y Pellegrini (4). En total, 265 millones de euros sólo en concepto de fichaje de jugadores y entrenador, aunque cabe precisar que en la cifra correspondiente a Xabi Alonso está incluida la comisión (3 millones) que asume el Liverpool. Estos 265 millones son fijos y serán abonados en tres plazos (33,3% al contado; 33,3% al segundo año; 33,3% al cuarto año), salvo en el caso de Ronaldo, cuyo importe completo fue pagado al United el 30 de junio en virtud del contrato firmado previamente por Calderón.

Con esta inversión de 265 millones netos en jugadores, Florentino Pérez pulveriza el anterior récord mundial (171,8 millones de euros) que poseía Roman Abramovich a su llegada al Chelsea. Fue en 2003 y con Claudio Ranieri llegaron 12 jugadores a Londres: Makelele, Hernán Crespo, Joe Cole, Damien Duff, Verón, Mutu, Geremi, Parker, Glen Johnson, Wayne Bridge, Smertin y Sullivan. 171,8 millones que no le sirvieron a Ranieri para sobrevivir a las ambiciones de Abramovich, que al año siguiente invirtió otros 144 millones en traerse al clan portugués (Mourinho, Carvalho, Ferreira, Tiago y Morais) más Drogba, Cech, Robben, Kezman y Jarosik, esquema con el que el Chelsea encadenó dos Ligas. Inversiones muy superiores, por cierto, a la realizada esta temporada por el Manchester City y que tanto ha escandalizado a gente como Ferguson o Wenger (quizá porque les amenaza). El City ha invertido 113 millones en cinco jugadores (Adebayor, Tévez, Barry, Santa Cruz y Kolo Touré), bastante menos de la mitad que el Madrid.

Florentino Pérez ha adquirido algunos otros compromisos económicos en cuanto a los fichajes, referenciados a conceptos variables: 7 millones para el Olympique de Lyon por Benzema o 5 millones para el Liverpool por Xabi Alonso, pero estas cifras no pueden sumarse ahora en el cómputo global al tratarse de variables ligados a resultados.

Por el contrario, a los 265 millones en fichajes sí hay que añadirle las comisiones oficiales pagadas a los representantes de los jugadores, que por lo general serán abonadas durante los años de amortización de los fichajes y que son las siguientes: Jorge Mendes (9,6 por Cristiano Ronaldo), Bosco Leite (9 por Kaká), Karim Djaziri (3,9 por Benzema), García Quilón (2,5 por Albiol y Arbeloa).

El total de comisiones por la gestión de traspasos asciende a 25 millones, considerando que en el traspaso de Xabi Alonso ya va incluida la de su representante. Esto eleva la cifra de fichajes hasta los 290 millones, que es la auténtica cantidad comprometida este verano, muy cerca de los 300 millones que Florentino dijo tener para este capítulo. De estos 290 millones, 155,5 millones ya han sido pagados de modo efectivo por el club blanco o lo serán en pocas semanas. Para hacer frente a dichos pagos, el Madrid ha firmado dos préstamos bancarios con dos de las entidades que siempre apoyaron a Florentino Pérez, tanto en el club como especialmente en su empresa ACS: Cajamadrid y Banco Santander. Ambos créditos suman un total de 151 millones, cantidad que prácticamente cubre el pago de los 155,5 millones exigidos en el cortísimo plazo.

El préstamo de Cajamadrid, que fue la entidad que prestó a Florentino Pérez los 60 millones que costaba la cláusula de rescisión de Figo, se eleva a 76 millones de euros a devolver en cinco años y está avalado por el contrato de explotación de derechos televisivos firmado entre el Madrid y Mediapro por un valor estimado de 600 millones en cinco años. El préstamo del Banco Santander, con quien Florentino ha apalancado siempre sus inversiones personales en ACS, asciende a 75 millones avalados con los ingresos por taquilla y aforo del estadio Santiago Bernabéu de las cinco próximas temporadas (615 millones estimados). Con estos dos préstamos se cubre la exigencia de pagos a corto plazo y quedan pendientes de pago comprometido otros 134,5 millones: 54,75 deberán ser pagados en 2010 y los restantes 54,75 antes de agosto de 2012, amén de otros 5,1 millones anuales en concepto de comisiones hasta 2013.

El incremento de la masa salarial también es notable, pues los sueldos galácticos comprometidos son muy elevados. Cristiano Ronaldo: 78 millones (6 años a 13); Kaká: 60 (5 años a 12); Benzema: 67,2 (6 años a 11,2); Xabi Alonso: 30 (5 años a 6); Albiol: 15 (5 años a 3); Arbeloa: 15 (5 años a 3); y Granero: 7,2 (4 años a 1,8).

El total salarial comprometido asciende a 272,4 millones a sumar al grueso de la plantilla. En dicha cifra no contabilizo el sueldo firmado con Negredo, candidato a salir del club la próxima semana, ni tampoco el del entrenador. Anualmente, estos siete jugadores supondrán un incremento salarial de 50 millones respecto del ya existente. Contablemente, las amortizaciones de los nuevos fichajes tendrán una incidencia muy importante en el balance anual, pues supondrán otros 47 millones amortizables cada temporada a sumar a los ya existentes, lo que es una garantía de conflicto en las cuentas de la entidad. No serán pequeños tampoco los intereses bancarios a pagar a Cajamadrid y Banco Santander, estimados en 26,5 millones a repartir entre los próximos cinco años. El resumen financiero es que el Madrid ha adquirido un potencial futbolístico extraordinario, pero también ha puesto en grave peligro sus cuentas anuales y su equilibrio económico.
A
cambio, ha conseguido restar algunas nóminas y percibir algunos ingresos por traspaso. Huntelaar (15 millones), Javi García (7), Saviola (5) y Parejo (3). Por Heinze, Salgado y Codina no ha obtenido nada. En total, 30 millones teóricos (más otros tres variables por Huntelaar según resultados) que deben matizarse, puesto que de los 15 millones que el Madrid cobrará del Milan por el holandés tiene que pagarle 7 al Ajax, según contrato firmado el pasado enero.

La salida de Salgado no sólo es nula, sino negativa porque el club le ha pagado 3,5 millones por aceptar la baja. Así que los ingresos netos de las salidas a día de hoy ascienden a 19,5 millones, cifra que puede elevarse en los próximos días con la marcha de Negredo, Van der Vaart y algún otro jugador más. En paralelo a ello, el Madrid ahorrará los salarios firmados con Heinze (4,2 millones por un año más), Saviola (3,6 millones dos temporadas más), Huntelaar (3,8 millones durante tres años más) y cantidades muy poco significativas en los casos de Javi García, Codina y Parejo. El ahorro salarial es de 24,8 millones, menos del 10% del gasto nuevo comprometido en sueldos (272,4 millones).

El saldo neto final de la operación NeoGalácticos es el siguiente:

- Fichajes: 265

- Comisiones: 25

- Traspasos netos: 19,5

Esto arroja un saldo neto en concepto de fichajes de 270,5 millones, una vez sumadas comisiones y restadas las salidas de jugadores. Este concepto podrá modificarse en los próximos días hasta alcanzar posiblemente un saldo neto final de 250 millones, muy lejos de lo pronosticado por Florentino Pérez, que pretendía invertir 300 millones (casi lo ha hecho) y recuperar 120 por traspasos (en esto ha fracasado de momento) para un gasto final de 180. Como mínimo serán 70 más. En cuanto a los compromisos salariales, el incremento (272,4 millones más) es gigantesco, ya que la reducción de sueldos por traspasos (24,8) prácticamente queda anulada por los intereses bancarios de los préstamos obtenidos (26,5). En resumen, la operación de Florentino ha sido muy espectacular en lo futbolístico, pero es profundamente arriesgada en lo económico, pues deja al Madrid al borde del abismo, salvo que incremente anualmente sus ingresos de forma explosiva y, además, lo haga de modo sostenible.